El municipio de Valle Gran Rey, situado al oeste de La Gomera, es, con sus 33 km2 de extensión, el segundo más pequeño de la isla. Sin embargo, en su escaso territorio el contraste y la rotundidad son rasgos que definen sus paisajes:
- De los verdes y brumosos montes de Arure y Las Hayas, al colorido de los barcos pesqueros que descansan en Vueltas;
- De las arenas negras de Playa del Inglés a los paredones que ayudados por palmas suben por los riscos de Guadá o Taguluche;
- De los cultivos tropicales de la zona baja a los viñedos que se derraman por la vegas de las zonas altas.
El municipio se conforma en tres grandes sectores: Valle Gran Rey, los altos de Arure y las Hayas, y Taguluche.
El primer sector, Valle Gran Rey, es un profundo valle cuya desembocadura se adentra en el mar con forma de cono de deyección, y en el que los núcleos poblacionales se han asentado de forma dispersa: Guadá, en la zona alta del valle; Casa de La Seda, El Guro y Piedras Quebradas en el tramo medio; Las Orijamas y La Calera en las laderas al final del cauce; y La Playa, La Puntilla, Borbalán y Vueltas en la zona costera.
Arure, que fue capital municipal hasta finales del siglo XIX, se encuentra situado en la zona alta del municipio, a unos 800 metros sobre el nivel del mar. Muy próximo y más cercano al Parque Nacional de Garajonay se encuentra el caserío de Las Hayas. Ambas entidades se han caracterizado por ser zonas agrícolas y ganaderas muy vinculadas al monte.
El otro sector del municipio es Taguluche, situado al noroeste del mismo. Encajado en un pequeño valle muy escarpado, su caserío constituye uno de los paisajes más representativos de La Gomera: casas tradicionales, terrazas de cultivos y un espléndido palmeral.